Los pulgones son uno de los parásitos más conocidos y
temidos en nuestros huertos.
Se caracterizan por tener un pico
succionador-chupador con el que perforan las hojas y los tallos de las plantas
para alimentarse de la savia.
Es muy frecuente observar juntos a pulgones y hormigas, ya
que éstas últimas “pastorean” a los pulgones. Las hormigas descubren plantas
óptimas para el ataque por los pulgones, los cuales son transportados hasta
éstas hortalizas por las hormigas. Por su parte, éstas se alimentan de una
sustancia azucarada que segregan los pulgones (melaza).
Los cultivos hortícolas que suelen verse afectados por
plagas de pulgón son la judía, la col, la patata, el guisante, las habas y la
vid, aunque pocas de nuestras hortalizas se salvan del ataque de estos pequeños
insectos.
Hay muchos métodos para combatir esta plaga, pero como
nuestro huerto es ecológico, hablaremos de remedios caseros y enemigos
naturales del pulgón (depredadores naturales de los mismos). Podemos plantar
hisopo cerca del cultivo afectado, pues es una planta cuyo olor los ahuyenta.
Como enemigo natural, destacaremos a la mariquita de siete puntos (Coccinella
septempunctata), insecto muy fácil de conseguir y que devorará a los pulgones
en un breve período de tiempo. Estas mariquitas en estado de larva pueden comer
entre 350 y 400 pulgones.
Casi todas las
plantas del jardín y de interior se pueden ver afectadas por pulgones.
Algunas remedios que se deben seguir para evitar el ataque
de pulgones son:
• Tienen muchos enemigos naturales: mariquita, crisopa,
pequeñas avispillas que los parasitan, etc… pero ninguno es totalmente efectivo.
• Un solución muy efectiva contra el pulgón es pulverizar
las plantas afectadas con agua jabonosa o con agua templada a presión.
• Otro remedio consiste en una infusión a base de ortigas.
¡Esperamos que esta entrada os resulte interesante!
Gracias por los consejos sobre este tema.
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