En estas fechas en las que abundan los pepinos en el huerto
y hay veces que no sabemos qué hacer con ellos, os proponemos un plato original
y sencillo. Se trata de salmorejo, pero esta vez con el toque refrescante del
pepino. Gracias a los compuestos aromáticos que comparte con el melón,
resultará un salmorejo ligero, menos ácido y más dulce que el de tomate. Puedes
aprovecharlo también como salsa para ensaladas y otros platos.
Ingredientes:
- 1 pepino grande (350 g), también depende para cuántas
personas sean. Si van a ser al menos cuatro comensales, recomendamos un mínimo
de tres pepinos y ya sabemos el dicho: mejor que sobre…(siempre podemos
guardarlo en la nevera y dejarlo para la próxima comida/cena)
- 1 trozo de pan duro del día anterior (15 g)
- 30 gramos de
almendras crudas (opcional)
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen
- 1 cucharada de vinagre de manzana
- 1 diente de ajo pelado y sin nervio
- un par de cubitos de hielo (opcional)
- sal al gusto.
Preparación:
1. Bate con la batidora el pan, almendras, aceite, vinagre,
ajo, hielo y sal hasta que se haga una pasta.
2. Lava y pela el pepino. Córtalo en dados medianos y
añádelo a la batidora.
3. Bátelo todo junto 2-3 minutos hasta que quede una crema
suave. Puedes añadir un poco de agua si quieres. Pruébalo y añade más sal y
vinagre si lo ves conveniente.
4. Cuélalo con un chino o un colador fino y sírvelo bien
frío acompañado de picatostes, almendras, aceitunas, etc.
Esperemos que os guste. ¡A disfrutar!
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